domingo, julio 02, 2006

Mentes de destrucción masiva

“Has añadido insulto
a la injuria”
Phaedrus

PEROGRULLO: La manifestación más perversa de la cobardía es el abuso de poder. Utilizar posiciones de gobierno que en mala hora les otorgó el voto popular y el dinero de los impuestos municipales para atropellar brutalmente a los más débiles y pagar mercenarios del micrófono para que les intenten ocultar las tropelías es una interpretación sui géneris del socialismo del siglo XXI. Inverosímil, pero estamos ante mentes de destrucción masiva que solo los impulsa la ambición crematísticas y los ilegales, brutales y salvajes actos efectistas para ocultar la inmensa corrupción que ellos mismos denuncian a diario. Es la cobardía en su máxima expresión, manifestada salvajemente desde el poder. No olvidéis: A los hermanos que hoy atropellan, mañana les verán la cara sin la parafernalia del poder. Por cierto, ¿Que será del proyecto de los pollitos bebes?

TERRORISMO: El que le aplican a los humildes, más pobres y excluidos en la ciudad. Ante el fracaso del régimen para crear puestos de trabajo, la gente necesitada, pero decente, se incorpora a la legión de venezolanos que le sobreviven al proceso desde la economía informal. Una manera de ganarse la vida honestamente. Eso lo vemos a lo largo y ancho del país. Las autoridades municipales, concientes de la gravedad del problema, con sentido humano y gran sensibilidad social, les extienden la mano, los organiza, les brinda protección y hasta les concede créditos para que mejoren su condición de trabajo. En la ciudad que cambió para siempre, las mentes de destrucción masiva los persiguen como perros rabiosos y los rematan los mercenarios del micrófono. Por cierto, ¿Quién investigará el atraco de la mafia carupanera a las arcas municipales?

INVEROSÍMIL: El presidente Chávez ofrece otro gasoducto para Panamá. El proyecto es tan ambicioso que anuncian le dará energía limpia y barata a 3 generaciones de panameños. El otro gasoducto será del Caribe hasta la Patagonia, que surtirá de gas a todos nuestros hermanos del continente. Eso en el fondo no es malo, lo perverso es que nosotros, dueños absolutos por obra del señor de esa inmensa riqueza energética, no tengamos una humilde red de gas directo en la ciudad. Las mentes de destrucción masiva, que la tarjeta del MVR, los pocos que asistieron a votar y la ayudita del CNE, nos desgobiernan tienen la competencia de acuerdo a la ley para luchar por esa legítima reivindicación social que indiscutiblemente mejorara la calidad de vida de todos los vecinos. El rey maula y los mercenarios del micrófono eso ni lo tocan. Por cierto, ¿A cuanto ascenderá la monstruosa deuda del municipio?
VENENO: Puro el que dispara el mercenario del micrófono contra aquellos que se resisten a sus chantajes. Las mentes de destrucción masiva se retroalimentan. Uno paga con los dineros de los tigrenses y otro desde la orbita oficial se encarga del trabajo sucio, inmoral y obsceno. Hoy la víctima es el gobernador, ayer fuimos nosotros y mañana, tengan la seguridad, será el que hoy le sirve de sostén con los impuestos municipales. Soy opositor democrático, leal e insospechable de dobleces e indignidades del gobierno que lidera el Dr. Tarek William Saab Halabi, pero de allí, a traspasar la raya de invadir su vida familiar y personal me parece una aberración anti ética que solo cabe en la mente de destrucción masiva de un delincuente tarifado, que le dan la oportunidad de utilizar un micrófono. El juego de palabras que utilizó el lunes, resulto una morisqueta sicalíptica de baja ralea, soez, escatológica y de la peor estofa. Añadió insulto a la injuria. Un boomerang, pues. Pregunten en la calle. Recuerden: No es culpa del tartufo sino de quienes le dan el micrófono y el dinero para que despida su baba venenosa. Por cierto, ¿Que será del caso chawuarma?

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