“Fuertes razones hacen fuertes acciones”
William Shakespeare (1564-1616)
Poeta y autor teatral inglés.
William Shakespeare (1564-1616)
Poeta y autor teatral inglés.
El Presidente Chávez siempre reto a la sociedad venezolana recordándole el pasaje bíblico que reza “El que tenga ojos que vea” pues bien, los que tienen ojos en este país ya vieron. Estamos ante un gobierno derrochador, regalador de nuestras riquezas a otros países, mal administrador y que para colmo de males ha endeudado al país en cifras astronómicas que comprometen el futuro de varias generaciones. Nos hipotecó hasta el futuro. La gente vio y se convenció.
Los que tienen ojos han visto como este gobierno maula, inepto, ineficaz e irresponsable ha esfumado como por arte de magia, los más colosales ingresos de la historia patria. Ya la gente vio, sintió y siente como se va deteriorando la calidad de vida, los servicios públicos son una calamidad, la inflación esfuma el presupuesto familiar, la escasez estimula la brutal especulación y el INDEPABIS es tan inoperante como el gobierno. La gente vio y se convenció.
La gente ve horrorizada, atemorizada y asustada como la salvaje, feroz y violenta delincuencia hace de las suyas ante la mirada indolente del gobierno. Los que tienen ojos en Venezuela han visto que los hospitales están en terapia intensiva y da terror acercarse a solicitar algún servicio y, peor aún, algún medicamento. Sobran los ojos que ven con estupefacción como las morgues de los hospitales colapsan todos los fines semana con la cantidad de víctimas de la violencia desatada y el gobierno ni se inmuta. La gente vio y se convenció.
Hay que estar bien ciego para no percatarse que el gobierno intenta ocultar su fracaso repartiendo culpas a quienes no tienen velas en este entierro. La gente vio, ve y continúa viendo como la generosidad de Chávez, con los países que le son afectos, se llevan nuestros fabulosos ingresos petroleros para solucionar sus problemas y aquí en Venezuela, no hay la más mínima intención de solucionar problemas tan elementales como la vialidad interna de las ciudades. La gente vio y se convenció.
La gente aceptó el reto. Los que tienen ojos han visto el caos de socialismo del siglo XXI. Ahora nadie tiene dudas que el único responsable de todo este desastre tiene nombre y apellido: Hugo Rafael Chávez Frías. La gente no se come el cuento de que, fue la oligarquía criolla, la que se llevó los dineros de los “banquitos” que creó la chaveburguesía. ¡No! todos vieron que los verdaderos banqueros salieron incólumes de la crisis y más bien contribuyeron con el gobierno para apaciguar las angustias de los que creyeron en esos “banquitos” ligados al alto gobierno. La gente vio y se convenció.
Las encuestas ya reflejan el desmoronamiento de la popularidad de Chávez. Los venezolanos no son tontos e idiotas para no identificar el responsable del desastre y le da fuertes razones para las fuertes acciones que tomará con el voto el 26 de septiembre. Es la brillante oportunidad para cantarle el preaviso y recordarle que en diciembre del 2012, hay que buscar un nuevo gerente, decente, eficiente y conciliador. Los que tienen ojos han visto que ya se le dieron todas las oportunidades y las desaprovechó. En síntesis la gente vio y se convenció.
Los que tienen ojos han visto como este gobierno maula, inepto, ineficaz e irresponsable ha esfumado como por arte de magia, los más colosales ingresos de la historia patria. Ya la gente vio, sintió y siente como se va deteriorando la calidad de vida, los servicios públicos son una calamidad, la inflación esfuma el presupuesto familiar, la escasez estimula la brutal especulación y el INDEPABIS es tan inoperante como el gobierno. La gente vio y se convenció.
La gente ve horrorizada, atemorizada y asustada como la salvaje, feroz y violenta delincuencia hace de las suyas ante la mirada indolente del gobierno. Los que tienen ojos en Venezuela han visto que los hospitales están en terapia intensiva y da terror acercarse a solicitar algún servicio y, peor aún, algún medicamento. Sobran los ojos que ven con estupefacción como las morgues de los hospitales colapsan todos los fines semana con la cantidad de víctimas de la violencia desatada y el gobierno ni se inmuta. La gente vio y se convenció.
Hay que estar bien ciego para no percatarse que el gobierno intenta ocultar su fracaso repartiendo culpas a quienes no tienen velas en este entierro. La gente vio, ve y continúa viendo como la generosidad de Chávez, con los países que le son afectos, se llevan nuestros fabulosos ingresos petroleros para solucionar sus problemas y aquí en Venezuela, no hay la más mínima intención de solucionar problemas tan elementales como la vialidad interna de las ciudades. La gente vio y se convenció.
La gente aceptó el reto. Los que tienen ojos han visto el caos de socialismo del siglo XXI. Ahora nadie tiene dudas que el único responsable de todo este desastre tiene nombre y apellido: Hugo Rafael Chávez Frías. La gente no se come el cuento de que, fue la oligarquía criolla, la que se llevó los dineros de los “banquitos” que creó la chaveburguesía. ¡No! todos vieron que los verdaderos banqueros salieron incólumes de la crisis y más bien contribuyeron con el gobierno para apaciguar las angustias de los que creyeron en esos “banquitos” ligados al alto gobierno. La gente vio y se convenció.
Las encuestas ya reflejan el desmoronamiento de la popularidad de Chávez. Los venezolanos no son tontos e idiotas para no identificar el responsable del desastre y le da fuertes razones para las fuertes acciones que tomará con el voto el 26 de septiembre. Es la brillante oportunidad para cantarle el preaviso y recordarle que en diciembre del 2012, hay que buscar un nuevo gerente, decente, eficiente y conciliador. Los que tienen ojos han visto que ya se le dieron todas las oportunidades y las desaprovechó. En síntesis la gente vio y se convenció.
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