Una opción diferente y autentica

“Una meta fijada correctamente
es medio camino avanzado”
Zig Ziglar (1926-)
Escritor y conferencista estadounidense.

Quienes nos hemos formado en democracia, la digerimos, metabolizamos y asimilamos como el mejor sistema político para vivir, no podemos asumir una actitud pasiva, cuando se trata de elegir entre una autoridad que debe regir los destinos de su municipio de manera democrática, apegado al estamento legal, a la más elemental regla de convivencia ciudadana y cambiar un atorrante, violento, corrupto y peligroso, además de creerse dueño absoluto de la ciudad, los bienes y la vida de los ciudadanos. En ese escenario colocamos, con nuestra candidatura a la alcaldía, una alternativa diferente y autentica en representación de la sociedad democrática la cual es mayoría, para que los electores no se dejen encallejonar con burdos chantajes y manipulaciones mediáticas. ¡Cuidado! con nuevos Arias Cárdenas locales. El que está picado de Macagua cuando ve bejuco se espanta.

Tenemos formación, conocemos la materia municipal, poseemos experiencia política y administrativa, nos hemos preparado para ejercer la gerencia política e interpretamos al pie de la letra el espíritu propósito y razón que animó, alentó y vivificó al legislador cuando se discutió y aprobó la elección de gobernadores, alcaldes y legisladores de manera directa por parte del pueblo. Todo se reduce en descentralizar el poder, los recursos y la toma de decisiones, las cuales deberán y deben ser consultadas con las personas, grupos, sectores o comunidades afectadas para bien o para mal. Una nueva filosofía de gobierno centrada en la concertación de la gestión entre el pueblo y el gobierno. Entre el elector y el elegido. Acercar el poder al pueblo con un gerente político como líder y no con un mandón violento, arbitrario, arrogante, soberbio, agresivo y abusador como el actual. Es la triste realidad y con la verdad ni ofendo ni temo.

En esa dirección y entendiendo que el pueblo no elige reyezuelos, monarcas y mucho menos amos, mandones, autócratas, déspotas y dictadores, es que colocamos nuestro nombre a consideración del elector como candidato a alcalde para ofrecer, repito, una alternativa diferente, que nos permita orientar la gestión municipal en plena armonía, coherencia, consulta permanente y pactada con los verdaderos dueños del poder originario que es el pueblo. Nadie está autorizado para atemorizar, aterrorizar, atropellar y hasta asesinar vecinos en nombre de una lucha contra la delincuencia, que cada día se recrudece más por efectos de la violencia desatada desde el poder local. Eso hay que cambiarlo y lo vamos a cambiar. Violencia genera violencia y el que siembra viento cosecha tempestades.

Estamos obligados a concertar una verdadera política de seguridad ciudadana entre el poder regional, nacional, los vecinos organizados y las autoridades locales. Respetar al ciudadano, desterrar la discriminación por condiciones económicas y razones de sexo, consultar con el soberano las decisiones en materia presupuestaria, elaboración del listado de obras prioritarias, darle poder contralor a los vecinos, garantizar un clima de convivencia que nos permita vivir en paz, sosiego, armonía y sin temor a ser atropellado por quienes, pagados con nuestros impuestos, están obligados por ley a resguardar nuestras vidas, bienes y asegurar el orden público. No es mucho pedir y nosotros lo vamos a garantizar. Querer es poder y lo vamos a lograr.

Hay tres opciones: La del chavismo autentico que lidera un concejal oficialista foráneo muy poco conocido, la del chavista despechado representado por el atorrante, violento y peligroso que pretende continuar su ya larga cadena de abusos y tropelías, que no aguanta dos pedidas para volver al redil del chavismo de donde proviene y otras opciones opositores, donde se encuentra la nuestra, que estamos convencidos representa por autentica, leal, consecuente, constante y aguerrida en el tiempo, la única certificada de la verdadera oposición. Esa es la verdad y la realidad ante la que tendrán que distinguir, preferir y votar los electores el 23 de noviembre. No hay que buscar a Dios por los rincones.

Pretender polarizar entre chavistas la elección son burdas manipulaciones que provienen del chavista atorrante que tiene como operadores mediáticos a unos áulicos parlantes tarifados con dineros del tesoro municipal. Es una pantomima que ya no engaña a nadie. El 24 de noviembre en la mañana nos vemos. La sociedad democrática decente, digna y de buena memoria, los espera en la bajadita. Poseemos, al lado de la mayoría, una meta correctamente trazada. Es cuestión tener un poquito de paciencia. A la hora de pagar nadie es tramposo. Escríbanlo.