viernes, octubre 26, 2007

La autodeterminación de los pueblos

El respeto al derecho
ajeno es la paz

Benito Juárez.
Una de las conquistas del siglo 20 fue precisamente, arraigar en la conciencia colectiva internacional el derecho que tienen todos los países a su autodeterminación. Los pueblos haciendo valer ese derecho y cuando viven en libertad, en democracia y poseen gobiernos legítimamente electos, reclaman con justicia se le respeten su independencia y autonomía para decidir su destino. Nadie por muy líder que se crea, por mucho poder económico que ostente, está autorizado para intervenir en los asuntos internos de otros países. Zapatero a sus zapatos.

Los venezolanos hemos visto con especial interés, que el Presidente Chávez sea estrictamente celoso en resguardar la independencia y soberanía del país. En eso lo apoyamos irrestrictamente. Pero observamos con gran preocupación que valiéndose de la gran riqueza petrolera que poseemos los venezolanos, ésta no sea utilizada para impulsar el desarrollo y el bienestar interno y por el contrario se empeñe en incursionar indebidamente en otros países, haciendo lo que nosotros nos negamos a que nos hagan. Hay que respetar para que nos respeten.

Los casos de Argentina, Nicaragua, Perú, Cuba, Ecuador y en especial Bolivia, para sólo hablar de nuestra región, son ilustrativos. Todos los procesos sociales, políticos y electorales de esos países hermanos, en estos últimos años, nos han costado una inmensa fortuna. No solamente son los miles de maletines que circulan de manera secreta y el que por un error descubrieron los gauchos, son los cheques que exhiben los alcaldes bolivianos y los millones de dólares que cándidamente dicen las autoridades del altiplano que se extraviaron. Es tanto los miles de millones de dólares que les llega de Venezuela que se pierden 11 millones y nadie dice, ni hace algo, al menos públicamente. No olvidéis que esos dineros son públicos y hay que rendir cuentas. Una menudencia Ciliberto, dixit.

El presidente Chávez, tan amante a la música mexicana, pareciera olvidar la letra del extraordinario éxito que popularizaron Los Panchos que sentencia “El cariño comprado ni puede querernos ni sabe ser fiel” En Bolivia hay los primeros brotes violentos del descontento que produce la grosera intromisión del gobierno venezolano con la petrochequera. En todos los países hay movimientos que rechazan ese indebido entrometimiento y lo han hecho por la vía diplomática, pero era previsible que surgieran esos brotes violentos en salvaguarda de la soberanía y dignidad de sus pueblos. El que siembra viento cosecha tempestades.
“Tanto entre los países, como entre las personas, el respeto al derecho ajeno es la paz” sentenció sabiamente el héroe azteca, don Benito Juárez y nosotros coloquialmente decimos “No hagas, lo que no quieres que te hagan” Es hora de respetar la soberanía y la autodeterminación de cada país, la solidaridad y la cooperación por la vía legal cuando se pueda y se requiera es lícita y humana. Mientras tanto cada quien tiene que dedicarse a gobernar eficiente y decentemente el país para lo cual fue electo. Hay que atender a los coterráneos invirtiendo los petrodólares que son sus legítimos dueños. Por los detalles se cuela el demonio.

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