“El dinero es un buen siervo, pero mal maestro”
Francis Barón de Verulam Bacon (1561 – 1626)
Filósofo y estadista británico.
Francis Barón de Verulam Bacon (1561 – 1626)
Filósofo y estadista británico.
Cerramos en el año con los ingresos petroleros más fabulosos de la historia patria (Más de mil millones de millones de dólares) También con el endeudamiento más gigantesco que se conozca (200 mil millones de dólares) y con todos esos inimaginables recursos, también culminamos el año, con la más alta inflación del globo terráqueo, el aparato productivo en el suelo y una escasez de alimentos de primera necesidad espantosa. En medio de ese desolador escenario, el líder del proceso de destrucción nacional, se proclama como el gran administrador de los dineros del pueblo. Increíble, pero cierto.
El gran “administrador” de los ingresos nacionales, manejó 2 presupuestos. Calculó el Presupuesto Nacional Oficial, el que aprueba la Asamblea Nacional, sobre la base de un barril de petróleo a 40 dólares y al final del año el promedio supera los 100 dólares. Los otros 60 y tantos dólares, los “administra” a discreción. Tengo una platica, debajo del colchón, anuncia con desparpajo el dueño del latifundio. Millardos y más millardos de dólares. El gran latifundista y oligarca nacional hecho en socialismo. Ver para creer.
Con esa práctica, arbitraria en el manejo de los ingresos nacionales, esquilma, los recursos a los gobiernos regionales y locales, que no le son afectos, premia y castiga a los que son de su partido y evade la rendición de cuentas. No hay transparencia en la administración pública, la Contraloría General de la República, es una convidada de piedra y nadie, absolutamente nadie, controla al gran “administrador” de los recursos del país. El gran señor feudal del siglo 21.
Con esa súper bonanza petrolera, no hay producción en el campo, la infraestructura nacional está en estado calamitoso. Las carreteras, autopistas y vías de penetración agrícola, corren el riesgo de desaparecer por falta de mantenimiento. Las ciudades en general lucen arrasadas, no tapan los huecos, no recogen la basura, no atienden los ornatos y tampoco hay sustentabilidad en los servicios públicos. El gran “administrador” pareciera desconocer esa triste realidad. La inopia no lo exime de culpas. Es el gran responsable.
Lo que más angustia a la población, es la destrucción del aparato productivo, la inflación, la escasez, la especulación salvaje, el desempleo, la inseguridad y la violencia generalizada. El gran “administrador” ha tenido dinero en exceso, tiempo de sobra y discrecionalidad infinita, para hacer una gran obra de gobierno y tener a Venezuela como una potencia emergente, empero la tiene en emergencia. Los resultados indican, a final de este año, que completan 13 en el poder, que ha actuado como un Rey Midas al revés. Todo lo que tocó lo malversó, desfalcó y corrompió. Una desgracia total
Estamos al final de una revolución decadente. El gran “administrador” nacional, nos arruinó, nos endeudo y nos desfalcó. El 07 de octubre, del año 2012, hay que votar por el cambio. Venezuela está obligada a retomar el camino, elegir un administrador decente, diligente y eficiente. El actual lo envileció el dinero. Hay que sustituirlo. Esa es la meta. Uníos, uníos o la anarquía os devorará, decía Bolívar. Nunca lo olvidéis. ¡Feliz año nuevo!
El gran “administrador” de los ingresos nacionales, manejó 2 presupuestos. Calculó el Presupuesto Nacional Oficial, el que aprueba la Asamblea Nacional, sobre la base de un barril de petróleo a 40 dólares y al final del año el promedio supera los 100 dólares. Los otros 60 y tantos dólares, los “administra” a discreción. Tengo una platica, debajo del colchón, anuncia con desparpajo el dueño del latifundio. Millardos y más millardos de dólares. El gran latifundista y oligarca nacional hecho en socialismo. Ver para creer.
Con esa práctica, arbitraria en el manejo de los ingresos nacionales, esquilma, los recursos a los gobiernos regionales y locales, que no le son afectos, premia y castiga a los que son de su partido y evade la rendición de cuentas. No hay transparencia en la administración pública, la Contraloría General de la República, es una convidada de piedra y nadie, absolutamente nadie, controla al gran “administrador” de los recursos del país. El gran señor feudal del siglo 21.
Con esa súper bonanza petrolera, no hay producción en el campo, la infraestructura nacional está en estado calamitoso. Las carreteras, autopistas y vías de penetración agrícola, corren el riesgo de desaparecer por falta de mantenimiento. Las ciudades en general lucen arrasadas, no tapan los huecos, no recogen la basura, no atienden los ornatos y tampoco hay sustentabilidad en los servicios públicos. El gran “administrador” pareciera desconocer esa triste realidad. La inopia no lo exime de culpas. Es el gran responsable.
Lo que más angustia a la población, es la destrucción del aparato productivo, la inflación, la escasez, la especulación salvaje, el desempleo, la inseguridad y la violencia generalizada. El gran “administrador” ha tenido dinero en exceso, tiempo de sobra y discrecionalidad infinita, para hacer una gran obra de gobierno y tener a Venezuela como una potencia emergente, empero la tiene en emergencia. Los resultados indican, a final de este año, que completan 13 en el poder, que ha actuado como un Rey Midas al revés. Todo lo que tocó lo malversó, desfalcó y corrompió. Una desgracia total
Estamos al final de una revolución decadente. El gran “administrador” nacional, nos arruinó, nos endeudo y nos desfalcó. El 07 de octubre, del año 2012, hay que votar por el cambio. Venezuela está obligada a retomar el camino, elegir un administrador decente, diligente y eficiente. El actual lo envileció el dinero. Hay que sustituirlo. Esa es la meta. Uníos, uníos o la anarquía os devorará, decía Bolívar. Nunca lo olvidéis. ¡Feliz año nuevo!
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