“Lo que hoy está probado, ayer era apenas un sueño”
William Blake (1757 – 1827)
Poeta, pintor, grabador y místico inglés.
William Blake (1757 – 1827)
Poeta, pintor, grabador y místico inglés.
Luego de más de medio siglo, de un sistema comunista fracasado, obsoleto e inhumano, los Castro (Fidel y Raúl) coinciden en la necesidad que tienen de “Actualizar el modelo”, una manera muy sui generis de iniciar un proceso de apertura económica, en el marco de un gobierno comunista. Les ofrecen a los cubanos un arroz con pollo sin pollo. Las reformas políticas se reducen a limitar el ejercicio de los cargos públicos a sólo 10 años. Fidel se mantuvo 50 y abdicó, por razones de salud, pero dejando el poder ¿hereditario? a su hermano menor, el cual presintiendo “su” vida útil probable, pide esos 10 añitos más para retirarse y después sálvese el que pueda. “Después de ellos, el diluvio” parafrasean al rey francés Luís XV (1710-1774)
En Venezuela, Chávez ya lleva 12 años en el poder, en diciembre del 2012, arribará a 14 o sea que de seguir la recomendación de sus tutores cubanos, debería retirarse. 10 años, después que ellos van para 60, es suficiente tiempo en el poder, reconocen “piadosamente” los hermanitos Castro. ¡Una maravilla! ¿Les seguirá la recomendación el autócrata venezolano? A motu proprio lo descartamos. Eso no importa. En diciembre del año 2012, habrá elecciones y, el pueblo soberano, a punta de votos, se encargará de eyectarlo del poder. El venezolano sabe que en Cuba van de regreso y, a Venezuela Chávez, pretende conducirla a la ruina, de la que hoy, quiere salir la sociedad cubana. Los procesos son irreversibles. Un sueño imposible, pues.
Cuba tiene una economía en ruinas. No tiene aparato productivo. La producción de azúcar, que era su fuerte, declinó tan dramáticamente, que ahora son importadores del producto bandera de sus exportaciones. Los subsidios, que les provee el gobierno de Chávez, con las riquezas de los venezolanos, no son suficientes para mantener una burocracia parasitaria que depende, con sueldos míseros del aparato estatal. Tienen que abrirse a la iniciativa privada o esa al capitalismo salvaje, para poder reestructurar la economía y hacerse competitivos en un mundo globalizado y moderno. A eso ellos lo intentan disfrazar llamándolo eufemísticamente “Actualización del modelo”, bien difícil se le hace reconocer el fracaso, pero lo que está a la vista no necesita anteojos. Vade retro, Satanás.
Chávez en estos últimos 12 años de “Involución” en su empeño de destrucción del aparato productivo del país – lo tiene a punto – ha dilapidado, la astronómica cifra de UN BILLÓN (UN MILLÓN DE MILLONES) de DÓLARES, una cifra que supera con creces todos los ingreso que ha tenido Venezuela desde la llegada de Colón, hasta el último gobierno de Caldera. Nuestra imaginación aunque poderosa, es incapaz de darnos una idea sobre semejante cantidad de recursos, los cuales de haber sido bien utilizados e invertidos en Venezuela, nos hubiese catapultado hacia el progreso, el bienestar, la prosperidad y una mejor calidad de vida. Entre regalos a países extranjeros, corrupción, malversación, despilfarro, derroche y dilapidación, Chávez echó por la borda, una oportunidad de oro para sacar a Venezuela de esta inmensa crisis, que ahora amenaza con devorarlo. Nadie escapa a su destino.
Venezuela y Cuba, Cuba y Venezuela o VENECUBA – como lo llaman los chapistas – viven procesos irreversibles. El comunismo fracasó e indefectiblemente, tienen que marchar hacía procesos democráticos con profunda proyección social, respeto a las libertades fundamentales, a la propiedad privada y reglas de juego jurídicamente claras, que permitan impulsar el desarrollo de los capitales internos y externos, único mecanismo generador de riqueza, empleo y prosperidad. En Cuba y en Venezuela, hay que “Actualizar el modelo” la realidad y los hechos son tercos. El comunismo fracasó, está probado. Hasta los sátrapas cubanos lo entendieron. ¿Y en Venezuela? después de diciembre del 2012, despegamos. No os desesperéis.
En Venezuela, Chávez ya lleva 12 años en el poder, en diciembre del 2012, arribará a 14 o sea que de seguir la recomendación de sus tutores cubanos, debería retirarse. 10 años, después que ellos van para 60, es suficiente tiempo en el poder, reconocen “piadosamente” los hermanitos Castro. ¡Una maravilla! ¿Les seguirá la recomendación el autócrata venezolano? A motu proprio lo descartamos. Eso no importa. En diciembre del año 2012, habrá elecciones y, el pueblo soberano, a punta de votos, se encargará de eyectarlo del poder. El venezolano sabe que en Cuba van de regreso y, a Venezuela Chávez, pretende conducirla a la ruina, de la que hoy, quiere salir la sociedad cubana. Los procesos son irreversibles. Un sueño imposible, pues.
Cuba tiene una economía en ruinas. No tiene aparato productivo. La producción de azúcar, que era su fuerte, declinó tan dramáticamente, que ahora son importadores del producto bandera de sus exportaciones. Los subsidios, que les provee el gobierno de Chávez, con las riquezas de los venezolanos, no son suficientes para mantener una burocracia parasitaria que depende, con sueldos míseros del aparato estatal. Tienen que abrirse a la iniciativa privada o esa al capitalismo salvaje, para poder reestructurar la economía y hacerse competitivos en un mundo globalizado y moderno. A eso ellos lo intentan disfrazar llamándolo eufemísticamente “Actualización del modelo”, bien difícil se le hace reconocer el fracaso, pero lo que está a la vista no necesita anteojos. Vade retro, Satanás.
Chávez en estos últimos 12 años de “Involución” en su empeño de destrucción del aparato productivo del país – lo tiene a punto – ha dilapidado, la astronómica cifra de UN BILLÓN (UN MILLÓN DE MILLONES) de DÓLARES, una cifra que supera con creces todos los ingreso que ha tenido Venezuela desde la llegada de Colón, hasta el último gobierno de Caldera. Nuestra imaginación aunque poderosa, es incapaz de darnos una idea sobre semejante cantidad de recursos, los cuales de haber sido bien utilizados e invertidos en Venezuela, nos hubiese catapultado hacia el progreso, el bienestar, la prosperidad y una mejor calidad de vida. Entre regalos a países extranjeros, corrupción, malversación, despilfarro, derroche y dilapidación, Chávez echó por la borda, una oportunidad de oro para sacar a Venezuela de esta inmensa crisis, que ahora amenaza con devorarlo. Nadie escapa a su destino.
Venezuela y Cuba, Cuba y Venezuela o VENECUBA – como lo llaman los chapistas – viven procesos irreversibles. El comunismo fracasó e indefectiblemente, tienen que marchar hacía procesos democráticos con profunda proyección social, respeto a las libertades fundamentales, a la propiedad privada y reglas de juego jurídicamente claras, que permitan impulsar el desarrollo de los capitales internos y externos, único mecanismo generador de riqueza, empleo y prosperidad. En Cuba y en Venezuela, hay que “Actualizar el modelo” la realidad y los hechos son tercos. El comunismo fracasó, está probado. Hasta los sátrapas cubanos lo entendieron. ¿Y en Venezuela? después de diciembre del 2012, despegamos. No os desesperéis.
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