viernes, febrero 15, 2008

La verdad y sólo la verdad

Existirá la verdad aunque el mundo perezca
San Agustín (354-430)
Obispo, filósofo y padre de la Iglesia Latina.

INMERECIDO: y desconsiderados los ataques desmedidos, groseros y desdeñosos por parte del Rey Maula a las colonias extranjeras, los miembros de la Cámara de Comercio, los pequeños comerciantes organizados en la Cámara Bolivariana, los dueños de terrenos y cuanto cristiano lo aborde en sus momentos de irascibilidad. No olvidemos que el alcalde es el primer empleado de la ciudad y como tal está para servir a todos los sectores con armoniosa diligencia y comportarse decorosamente. Indistintamente, de la opinión tarifada de la orbita oficial, la gente en la calle está horrorizada. Entendemos que el poder, en algunos casos envilece, pero a esta nulidad engreída, de acuerdo al comentario generalizado, se le volaron los tapones. La verdad y sólo la verdad.

FRACASO: Indiscutible el del gobierno local. El mismo Rey Maula convoca su equipo de gobierno y les restriega en la cara que han fracasado. En tres años de gestión los resultados están a la vista: La ciudad está en el suelo. Una verdad del tamaño del océano de dinero que han manejado y que se ha tragado la más espantosa corrupción jamás conocida en los anales de la historia municipal. El maquillaje no aguantó más y el rimel se descorrió. El desastre es total. Con visitar el cementerio, los mercados municipales, el Terminal de pasajeros o algún sector popular, escogido al azar, está la muestra palpable de cómo la ciudad se cae a pedazos. Nunca antes había estado en peor estado. No hay acción del gobierno local, ni gestión del alcalde ante los organismos regionales y nacionales. La indolencia, la corrupción y el “A mí no me toca” es el sello de esta catástrofe. La verdad y sólo la verdad.

EXPLOSIVA: La situación que viven los habitantes de la vecina población de Soledad. La inflación, la especulación y la escasez en lo productos de la dieta diaria, los tiene al borde de un estallido social. Es tanta la angustia, la desesperación e intranquilidad que cada vez que llega un transporte de alimentos para poder descargar tiene que ser custodiado por los cuerpos de seguridad y evitar los saqueos. El estado de crispación es generalizado y se acrecienta con la delincuencia desatada, el mal estado de la carretera que los une con el resto del estado y el pésimo suministro de agua potable. “Somos un pueblo abandonado y sin ley” me comentaron muchos vecinos. Inocultable esa realidad y se puede percibir con dispensarles una visita. Es la verdad y sólo la verdad.

TEMORES: Los que abrigan algunos sectores políticos de la ciudad, con relación a la campaña de descrédito que inicia el hamponato mediático que opera desde la orbita oficial que lidera el inefable don bombillo y que sostiene con los dineros del erario municipal el Rey Maula, contra todo aquel que ose criticar su desastrosa y corrupta gestión de gobierno. Entendible, pero son los riesgos que hay que asumir con entereza desde la trinchera de la oposición cuando, por un accidente electoral alcanza el poder un energúmeno sin probidad, que no ha sabido ejercer con sobriedad, decoro, honestidad y respeto por sus administrados el poder transitorio, que en mala hora cayó en sus manos. Aquí nos conocemos todos, la gente identifica perfectamente la delincuencia mediática y aún cuando no lo dice públicamente, por temor a las campañas de desprestigio, lo expresa y lo comenta profusamente en los corrillos políticos, económicos y sociales. Es la verdad y sólo la verdad.

DESENMASCARADAS: por el gerente de Hidrocaribe las autoridades municipales – legislativa y ejecutiva – Nunca han presentado una solicitud formal para la municipalización del servicio de agua potable, no tienen proyecto que sustente esa posibilidad y para colmo de males, tampoco le cancelan el servicio que les presta (730 millones) a los entes municipales. Lo he dicho y lo sostengo, estamos ante el gobierno local más irresponsable, indolente, manirroto y corrupto de la historia de la ciudad. Han navegado en océanos de dinero, no presentan cuentas y tiene a la gente al borde del naufragio por efectos de la inacción. Los alaridos se escuchan cuando las crisis los atropellan, le colocan pañitos calientes, acentúan la dispendiosa campañita mediática, calman la gente, siguen la fiesta de la corrupción y los problemas de fondo continúan latentes. No se caigan a coba. Es la verdad y sólo la verdad.
No es mi verdad, es la verdad que está a la vista y que la gente, cuando conversa con uno, trasmite con angustia, desesperación e impotencia, para que la hagamos pública a través de esta modesta columna. No es mi verdad, ni tú verdad, nadie es dueño absoluto de la verdad, sencillamente existe la verdad y cuando proviene del pueblo es la voz de Dios, por eso perdura y sale a flote, aún cuando perezcan los gobiernos. Los gobiernos pasan, pero el hambre y los problemas quedan. Pareciera, por ahora, nos persigue esa fatalidad.

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